Ella

Tenía miedo de pensarla y asociarla a la canción que estaba escuchando, últimamente era una de mis favoritas y quería seguir poniéndola, retrocederla a las partes claves y disfrutarla en los momentos exactos que tanto me gustaban y que quedaban marcados en mi memoria, así que no me atrevía a mancharla, a crear una relación entre ella y la canción. Pero en el acto de negarme a pensar en ella, más pensaba en ella y más me obsesionaba con no pensar en ella. Era una fijación que no podía sacarme de la cabeza que ya me comenzaba a doler de tantas horas de rumiación. Deseaba que se detuviese sin tener que dejar de escuchar música, esa canción en particular, sacrificarla, si lo hacía perdería la batalla. Creía que no era tan débil de mente como para no poder dejar de imaginarla, así que seguía escuchando la canción y seguía tratando de no pensar en ella, una y otra vez, una y otra vez, una y otra vez, hasta que creaba una asociación tan fuerte que la canción siempre me recordaría a ella.